¿Alguna vez te has preguntado por qué es tan difícil cambiar esos patrones internos de comportamiento?
Queremos cambiar, nos ponemos buenos propósitos, planes de mejora, nos mentalizamos... y al final volvemos a caer en los mismos errores
Es interesante descubrir cómo influye en esto que nuestro cerebro divide y clasifica la información. Es algo que hacemos naturalmente, como cuando organizamos las piezas de un rompecabezas.
Te pondré otro ejemplo muy común para los conductores. Cuando llegas a un parking en el que hay mucho sitio libre, la decisión de dónde aparcar se demora buscando cuál es el mejor sitio. Por el contrario, cuando son pocos los espacios libres, enseguida buscamos dónde aparcar.
En definitiva, tu cerebro necesita que se lo pongas sencillo.
¿Cómo puedes ayudar a tu cerebro en el deporte?
Así como separas las piezas del rompecabezas, puedes dividir tu evolución en el deporte en cuatro áreas clave:
- El área técnica: Evalúa tus movimientos deportivos.
- El área táctica: Piensa en cómo aplicas tus habilidades en la práctica.
- El área física: Mide tu condición física.
- El área mental: Evalúa tu manejo de situaciones y tu fuerza mental.
Te propongo un ejercicio sencillo pero efectivo:
- Califícate del 0 al 10 en cada una de estas áreas.
- Pide a tus entrenadores que hagan lo mismo.
- Analiza los resultados y pregúntate: ¿Qué puedes empezar a hacer para acercarte más al 10 en cada área?
Este ejercicio marca el inicio de un entrenamiento significativo. Cuando empiezas a tomar medidas para mejorar, estás en el camino correcto hacia el éxito deportivo que deseas.
Si crees que puedes fortalecer tu mente en el deporte y estás motivado para hacerlo, te invito a explorar la Academia de Inteligencia Deportiva. Aquí encontrarás los recursos y la energía que necesitas para impulsar tu crecimiento y mejorar como deportista.
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Me encantará acompañarte en este viaje hacia tu mejor versión como deportista. Si quieres unirte, ¡espero verte dentro de la academia!