Después de la Segunda Guerra Mundial, la economía japonesa quedó totalmente devastada. Sin embargo, los japoneses, conocidos por su capacidad de reinventarse y buscar constantemente el crecimiento, comenzaron a desarrollar técnicas para mejorar la producción en sus empresas. Estos cambios los llevaron a convertirse en una potencia mundial tanto económica como tecnológica.
¿Qué es el KaiZen?
Hoy quiero hablarte de cómo podemos aplicar una de esas técnicas, el Kaizen, para mejorar nuestros deportistas. Si te quedas conmigo, aprenderás siete consejos concretos que puedes aplicar en tu entrenamiento diario.
Comencemos explicando qué es el Kaizen. Este término se compone de dos palabras: "Kai", que significa cambio o mejora, y "Zen", que se traduce como bueno o beneficioso. En pocas palabras, podemos interpretarlo como "mejora constante", algo fundamental cuando se trata del rendimiento deportivo. Si te das cuenta, lo que hiciste ayer no te sirve de nada. Es importante seguir pensando en cómo mejorar y acercarte cada vez más a tus retos, tus objetivos y las razones por las cuales practicas deporte. Si te esfuerzas por ser un poco mejor en cada entrenamiento, competición e incluso en tu día a día cuando no estás entrenando, eventualmente alcanzarás un rendimiento óptimo. Esta debe ser tu meta a partir de ahora: tener claro los pasos que debes dar cada día para seguir mejorando.
Te mencionaré cinco aspectos generales en los que se basa el Kaizen.
- La implicación de todo el equipo de trabajo que rodea al deportista, incluyendo a las familias y los padres.
- Acumular pequeñas mejoras, convirtiendo los grandes objetivos en metas diarias alcanzables.
- Buscar resultados concretos y medibles, ya que cuanto más pequeños sean y más fácilmente se puedan medir, más motivadores serán y mejores resultados obtendrás
- Conocer todas las variables del proceso, lo cual implica la participación de todos los especialistas que trabajan con el deportista, como el preparador físico, el entrenador y el coach mental, cada uno aportando su experiencia. Además, es fundamental que la información fluya entre ellos, incluyendo a la familia.
- Por último, se busca la eficiencia y la economía, eliminando los procesos no productivos y enfocándose en hábitos y dinámicas que sumen en lugar de restar tiempo.
Siete consejos acerca del kaizen
Además de estos conceptos, quiero compartir contigo siete consejos importantes y sencillos para que comiences a mejorar y te conviertas en una mejor versión de ti mismo/a como deportista, aplicando el Kaizen.
Proponerte una mejora cada día, ya que esto te permitirá evolucionar de forma constante sin perder el ritmo. Experimentarás un crecimiento gradual que te hará sentir más fuerte, poderoso/a y mentalmente preparado/a para alcanzar retos que ni siquiera imaginas en este momento.
Avanzar paso a paso. Como dice el Cholo Simeone, en la Liga hay que ganar partido a partido. Del mismo modo, debes centrarte en avanzar paso a paso. Para lograrlo, la perseverancia es fundamental. Recuerda que el buen trabajo que realizaste ayer no sirve de nada si no lo repites hoy.
Buscar continuamente soluciones. Es inevitable que surjan problemas y errores en el camino. Sin embargo, en lugar de quedarte en la autocompasión o la queja, enfócate en encontrar soluciones. Los errores y los problemas son oportunidades de crecimiento. Cada vez que superes un obstáculo, estarás fortaleciéndote y avanzando. Dedica tiempo y esfuerzo a superar los desafíos, porque ese tiempo será bien invertido.
Cambiar tu perspectiva sobre los errores. En lugar de verlos como fracasos, concéntrese en encontrar la forma de que las cosas funcionen correctamente. Enfócate en aprender de cada experiencia y busca estrategias que te ayuden a mejorar. De esta manera, verás los errores como oportunidades y no como obstáculos.
Tomarte tu tiempo y evitar las prisas. Muchas veces pensamos que yendo rápido aprovecharemos mejor el tiempo, pero en realidad, podemos cometer más errores y tomar decisiones incorrectas. Tómate el tiempo necesario para reflexionar, planificar y actuar de manera adecuada. No te apresures, recuerda que tomarte tu tiempo no significa perderlo.
Simplificar las cosas. Busca formas de hacer las cosas de manera sencilla y eficiente. No creas que un entrenamiento o una jornada de trabajo compleja te llevará a un mejor rendimiento. Encuentra tu propio enfoque y disfruta del proceso sin complicarte demasiado.
Marcar tu propio ritmo. Como deportista, tú conoces tus fortalezas, debilidades y necesidades. Da retroalimentación constante a tu equipo de trabajo, incluyendo a entrenadores y especialistas, y utiliza esa información para ajustar tu entrenamiento y planificación. Encuentra el ritmo que se adapte mejor a ti y aprovecha al máximo tu potencial.
Si sigues estos consejos, comenzarás a trabajar en tu mejora continua como deportista y te acercarás cada vez más a convertirte en la persona que deseas ser en tu disciplina. Recuerda que lo que hiciste ayer solo es un paso hacia lo que debes hacer hoy y que centrarte en el presente es clave para alcanzar tus metas. ¡Empieza a trabajar en ello y disfruta del proceso de convertirte en tu mejor versión deportiva!
Y RECUERDA!!